Blogia
Psicoalba

Deportividad en la Educación Física

La deportividad es fundamentalmente el respeto a las reglas del juego. Pero también incluye la amistad, el respeto al adversario y el espíritu deportivo. Deportividad es, además un modo de pensar y una actitud favorable a la lucha contra la trampa y el engaño.

En clase de Educación Física aprendemos y practicamos deportes y juegos, mejorando físicamente nuestro cuerpo con actividades de coordinación, habilidad, resistencia, flexibilidad, agilidad, velocidad, etc, a la vez que trabajamos, nos divertimos y lo pasamos bien.

La deportividad es ante todo un principio positivo. La sociedad se enriquece con la práctica deportiva y con el intercambio personal y social que el mismo supone. El deporte ayuda a conocer mejor, a expresarse y a desarrollarse en un entorno social en el que se valore la salud y el bienestar.

El deporte, como herramienta educativa, es capaz de promover la práctica habitual de una educación en valores a toda la sociedad en su conjunto, a través de las buenas prácticas y ejemplos positivos. Representa una magnífica preparación para la vida, ya que es capaz de potenciar los valores humanos más nobles, ofreciendo la posibilidad de redescubrir la confianza en uno mismo, el trabajo en equipo, la superación personal, el valor del esfuerzo, la disciplina, el espíritu de excelencia.

Con todo esto llegamos a la conclusión de que el deporte es "algo" de lo que nos sentimos orgullosos por tal y como es, porque, siempre está ahí para alegrarnos el diá y motivarnos esos días malos que tenemos alguna vez o simplemente "algo" que nos ayuda a desconectar y pasar el rato tanto con los compañeros que como solos, ya que une a todo el mundo por igual y aumenta nuestras amistades y así comprendernos mejor los unos con los otros, dejando atrás toda diferencia y reprimiendo todo mal tanto individual como colectivo.

0 comentarios